¿Quieres saber cuáles son los riesgos laborales de un Vigilante de Seguridad? En este artículo te los contamos. ¿Quieres convertirte en Vigilante de Seguridad? Contáctanos.
El trabajo de un vigilante de seguridad es esencial para mantener la protección de personas, propiedades y bienes. Sin embargo, a pesar de su importancia, este trabajo no está exento de riesgos laborales que pueden afectar tanto la integridad física como la mental de quienes lo desempeñan. Debido a la naturaleza de su labor, los vigilantes de seguridad están expuestos a una serie de situaciones que requieren una alta capacidad de reacción, autocontrol y resistencia.
¿Qué trabajo desempeña un Vigilante de Seguridad?
Un vigilante de seguridad es responsable de proteger a las personas, bienes y propiedades contra cualquier amenaza o situación de riesgo que aparezca en su espacio de trabajo. Esto incluye tanto la prevención de incidentes como la actuación rápida y eficaz ante emergencias o situaciones críticas que se presenten, sea en el entorno que sea. Cabe aclarar que los vigilantes de seguridad realizan sus labores en una gran variedad de entornos, desde casas particulares, comercios y aeropuertos hasta partidos de fútbol o recitales.
Parte esencial de su trabajo es mantener el espacio seguro, lo que implica patrullar las áreas asignadas, monitorear sistemas de cámaras de seguridad y estar atentos a cualquier comportamiento sospechoso o actividad inusual. Además, deben manejar y coordinar protocolos de emergencia, colaborar con las fuerzas del orden cuando sea necesario y, en algunas ocasiones, realizar registros y controles de acceso a instalaciones para garantizar la seguridad de los usuarios y del espacio en cuestión.
Riesgos Laborales de un Vigilante de Seguridad
Los vigilantes de seguridad enfrentan una serie de riesgos laborales debido a la naturaleza de su trabajo. A continuación veremos algunos de los peligros más comunes que un vigilante puede encontrar en su día a día:
Riesgo de agresiones físicas
Uno de los mayores riesgos a los que se enfrenta un vigilante de seguridad es la posibilidad de sufrir agresiones físicas. En situaciones de altercados, robos o conflictos con personas, los vigilantes pueden estar expuestos a ataques por parte de individuos violentos. Este tipo de riesgo exige que los vigilantes estén entrenados en técnicas de defensa personal y manejo de situaciones conflictivas.
Riesgo de estrés laboral
El estrés es un factor importante dentro de este trabajo, ya que los vigilantes de seguridad deben estar atentos y alerta durante largas jornadas laborales. El constante estado de vigilancia y la necesidad de reaccionar rápidamente ante situaciones imprevistas pueden generar una alta presión psicológica, lo que incrementa el riesgo de padecer estrés crónico y fatiga.
Exposición a situaciones de riesgo
Los vigilantes de seguridad también pueden verse expuestos a riesgos derivados de situaciones como incendios, emergencias médicas o accidentes dentro de los entornos que vigilan. Su responsabilidad de coordinar respuestas rápidas ante estas eventualidades hace que estén constantemente expuestos a peligros que requieren de una respuesta eficiente y bien organizada.
Riesgo por largas jornadas laborales
El trabajo de un vigilante de seguridad generalmente implica turnos prolongados y, en muchos casos, horarios nocturnos. Esto puede afectar la salud física y mental del vigilante, aumentando el riesgo de padecer trastornos del sueño, fatiga acumulada y otras afecciones relacionadas con la falta de descanso adecuado.
Riesgo de exposición a condiciones ambientales adversas
Dependiendo del lugar de trabajo, los vigilantes de seguridad pueden tener que desempeñar sus funciones en exteriores, lo que los expone a condiciones ambientales extremas como frío, calor, lluvia o viento. Esta exposición prolongada puede provocar enfermedades relacionadas con el clima, como resfriados, golpes de calor o problemas respiratorios.
¿Vale la pena ser Vigilante de Seguridad?
Decidir si vale la pena ser vigilante de seguridad depende de una variedad de factores personales y profesionales. Para muchas personas, esta carrera ofrece estabilidad laboral, un sentido de responsabilidad y la posibilidad de desarrollar habilidades específicas que son valiosas en el mercado laboral. Sin embargo, también conlleva desafíos importantes, como el riesgo de enfrentar situaciones peligrosas o el estrés asociado con el trabajo.
Si valoras la estabilidad y el trabajo en entornos diversos, ser vigilante de seguridad puede ser una opción atractiva. Además, la demanda de personal de seguridad sigue en aumento, especialmente en un mundo cada vez más preocupado por la seguridad.
Por otro lado, quienes buscan un empleo con horarios más predecibles o que prefieren no enfrentarse a la tensión constante de estar en alerta pueden encontrar que esta profesión no encaja con sus expectativas. El trabajo nocturno, las largas jornadas y la responsabilidad de estar siempre preparado para emergencias pueden ser factores que desanimen a algunos.
En definitiva, ser vigilante de seguridad tiene sus ventajas y desventajas, y la decisión de si vale la pena dependerá de tí, de tus prioridades personales, tu capacidad para manejar situaciones de estrés y tu deseo de contribuir activamente a la seguridad en distintos entornos.
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